Karzai tomó tal decisión tras reunirse la semana pasada con ocho niños y adolescentes enganchados por los talibanes para realizar atentados suicidas en diversas provincias afganas. El grupo, detenido por los agentes del servicio de seguridad afgano, estuvo integrado por 20 chicos, de los que el menor no había cumplido siete años y el mayor, dieciocho.
El secretario de prensa adjunto reportó que otros doce chicos también serán amnistiados, pero podrán regresar a sus hogares sólo después de cumplir un programa de reintegración en la sociedad afgana y recibir conocimientos más elementales.
El propio Karzai, al intervenir ante los periodistas con motivo de la fiesta de Eid al-Fitr, volvió a instar a la oposición a deponer armas y a unirse al proceso de reconciliación nacional y de reconstrucción del país.
“No engañen a los niños, obligándolos a destruir nuestro Estado”, declaró Karzai, al dirigirse a los talibanes de Afganistán.