Justamente en el día de la mártir Tatiana, en 1775, la emperatriz Elizabeta Petrovna firmó un decreto por el que se instituía la primera Universidad en Rusia, hoy mas conocida como la de Lomonosov. Y ese día, o sea, el 25 de enero es considerado el de la fundación de la Universidad de Moscú. En un comienzo era celebrado solemnemente solo dentro de los muros de la honorable institución superior. Por la mañana del 25 de enero, los profesores asistían a misa a la iglesia universitaria de Santa Tatiana, y mas tarde se juntaban con los estudiantes en el paraninfo de la Universidad, edificio construido por Matvei Kazakov, arquitecto favorito de otra emperatriz rusa, Catalina la Grande. 

Cuando en Rusia surgieron otros establecimientos de enseñanza superior, la fiesta devino estudiantil. En el Día de Tatiana, las villas universitarias echaban “la casa por la ventana”, como se dice. Al margen de cómo se comportaran en las calles los estudiantes un tanto “entonados”, la policía actuaba con mano blanda, cumpliendo así la disposición oficial de no estropear la fiesta estudiantil. 

Formalmente, el día de Santa Tatiana se convirtió en el Día de los Estudiantes solo con el emperador Nicolás I, quien promulgó para ello un decreto especial. Después de la Revolución bolchevique de 1917, la fiesta, sin haber sido eliminada, quedó muy a trasmano. Y fue restablecida en sus derechos solo en 1995. 

Aunque el Día del estudiante es la fiesta de todos los universitarios, los que estudian en la Lomonosov estiman, no sin razones, que es mas de ellos. Porque en esa alma mater surgió la fiesta misma y la noción de la fraternidad estudiantil, señala Anastasia Roslova, egresada de la Facultad de Filología. 

-Todo egresado de la Lomonosov se alegra a encontrar a otro egresado de ella. Porque, todos los que estudiamos en la Lomonosov, no importa los años y la Facultad, nos sentimos hermanos. Y esa hermandad se siente de veras en la Universidad. El período mas hermoso de la vida de la persona son los años de estudiante. Ahora si los estudios se realizaron en la Lomonosov, ello es doblemente magnífico porque estudiaste con la conciencia de que lo hiciste en el centro superior mas antiguo de Rusia, que te empapaste con la historia y la cultura del país. Y eso es de veras, fantástico, concluye Anastasia Roslova. 

Por los materiales de La Voz de Rusia